Los Pactos de Dios con Nosotros

Lección 2

Los Pactos de Dios con Nosotros

(Mateo 6, Malaquías 3, 2 Corintios 9)

Introducción: Romanos capítulo 5 se refiere repetidamente a nuestra justicia ante Dios como un regalo. En caso de que estuviéramos confundidos acerca de lo que significa "regalo", se lo conoce repetidamente como un "regalo gratuito". Véase, p. Romanos 5:17. Sin embargo, algunos continúan preguntando: "¿Qué requiere que hagamos para aceptar el regalo?" No sería un regalo “gratis” si requiriera que hiciéramos algo. Hay, sin embargo, dos cuestiones estrechamente relacionadas. La pregunta práctica es si queremos el regalo. Muchas personas no aceptarían un obsequio de membresía de un gimnasio porque entienden el propósito de un gimnasio. Mucha gente no quiere la vida eterna en un Reino gobernado por Dios. Por lo tanto, una pregunta razonable es esta: "¿Realmente quieres el regalo gratuito de la vida eterna en una tierra nueva?" Preguntar si realmente desea un regalo no cambia el hecho de que es gratis. La segunda pregunta relacionada es nuestro estudio de esta semana. ¿Por qué Dios nos ordena hacer (o no hacer) ciertas cosas? ¡Sumerjámonos en nuestro estudio de la Biblia y aprendamos más!

1. Hacer Tu Cama No es Tu Primera Tarea
   
   1. Lee Mateo 6:33. ¿Qué debemos buscar primero cada día? (“El Reino de Dios y Su justicia”).
      1. ¿Qué crees que esto significa? (Haz primero las cosas que hacen avanzar el reino de Dios. Dado que la justicia es un regalo gratuito, la instrucción de Jesús de que la busquemos significaría actuar de manera consistente con una vida justa).
      2. El consejo a los jóvenes de que lo primero que deben hacer cada día es tender la cama es un consejo práctico. ¿Cómo encajarías este consejo práctico con el consejo de Jesús? (¡Ora antes de hacer tu cama!)
   2. Mira la última línea de Mateo 6:33. ¿Cuáles son las “cosas” prometidas? (Para esa respuesta tenemos que explorar el contexto anterior. Hagámoslo a continuación).
2. Una Vida Adecuada
   
   1. Lee Mateo 6:25. ¿Cuántos lectores están ansiosos por estas cosas? ¿No tendrías que ser muy pobre para preocuparte por lo básico de comer, beber y qué ponerte? (La mayoría de los lectores probablemente no estén demasiado preocupados por estas cosas).
   2. Lee Mateo 6:26 y Mateo 6:28-30. ¿Cuál es la respuesta de Jesús al tema de la preocupación? (El amor de Dios por ti. Dios ama los pájaros y las flores, y te ama a ti. Se ven muy bien y tú también te verás bien).
   3. Lee Mateo 6:27. Sospecho que esto se acerca mucho más a casa para la mayoría de los lectores. ¿Te preocupas por tu vida útil?
      1. Deberíamos preocuparnos por nuestra vida haciendo ejercicio, comiendo bien, usando cinturones de seguridad y absteniéndonos de fumar. ¿De qué está hablando Jesús? (La palabra clave es “ansioso”. La ansiedad es una preocupación innecesaria. No se refiere a tomar precauciones razonables).
   4. Lee Mateo 6:32-33. Explica qué están haciendo los gentiles y qué no hacen los seguidores de Jesús. (Esta es la gran división. Los paganos corren tras comida, ropa y vida. Dios automáticamente les da esto a aquellos que buscan primero Su reino).
      1. Observa que esta lección se refiere a “pactos”, contratos. ¿Jesús nos está ofreciendo un contrato? ¿Lo buscas primero y Él te cuida?
   5. Lee Mateo 6:34. ¿Cuántas veces te has preocupado de que te pasara algo malo en el futuro y nunca sucedió?
3. Una Vida Próspera
   
   1. Lee Malaquías 3:10. ¿Qué crees que es un “diezmo íntegro”? (Un diezmo es una décima parte de algo. La sugerencia es que la gente se inclinaba a hacer trampa con este 10%).
      1. ¿Qué resulta de pagar un “diezmo íntegro”? (Eres bendecido hasta el punto en que no necesitas nada).
      2. ¿Es esta una oferta de contrato? (Al menos es eso. Dios dice que lo “probemos”, lo cual es una solicitud para aceptar Su oferta).
   2. Lee Malaquías 3:11. Si fueras granjero, ¿qué control tendrías sobre “el devorador”? ¿Qué control sobre si sus plantas producirían? (Estas parecen ser cosas que están en gran parte fuera del control del agricultor. Por esto entiendo que Dios dice que él controlará aquellas cosas sobre las cuales no tenemos control).
   3. Lee Malaquías 3:12. ¿Cómo verán los demás tu vida? (Eres bendecido. Vivir tu vida es un deleite).
      1. ¿Es una aplicación personal un problema ya que esto se refiere a una nación?
   4. Lee Malaquías 3:13-14. ¿Eres escéptico de lo que acabamos de leer en Malaquías? (Estos versículos son una advertencia en contra de desafiar la promesa de Dios cuando se trata de pagar el diezmo).
   5. Lee Malaquías 3:15. ¿Cuál es la contrademanda de los que dudan? (Los soberbios y los malhechores prosperan y Dios no hace nada al respecto).
      1. ¿Crees que Dios está condenando a los que dudan, o está anticipando críticas a su oferta de diezmo? ¿O ambos?
   6. Lee Malaquías 3:16-17. ¿Malaquías está en otro tema? ¿O está esto relacionado con la discusión del diezmo? (Esto está relacionado. Dios hace una promesa de bendiciones que podrían no realizarse plenamente durante nuestra vida).
   7. Lee Malaquías 3:18. ¿La promesa del diezmo solo se realiza en el cielo? (¡No! El texto dice “una vez más verás la distinción entre [personas buenas y malas]”. El pago del diezmo es recompensado aquí y ahora).
   8. Hagamos algunas preguntas difíciles. Profundizaremos en esto en nuestra próxima lección. El templo (y su almacén) ya no existen. No tenemos el mismo sistema tribal en el que los levitas son sacerdotes y se mantienen con el diezmo. Y el Nuevo Testamento no dice nada a los gentiles acerca del diezmo. A la luz de esto, ¿todavía se requiere el diezmo?
   1. Lee 2 Corintios 9:6-9. ¿Qué principios encuentras aquí acerca de contribuir a la obra de Dios? (No encontramos un número obligatorio, 10%, sino que dice “dar” como lo hayas decidido en tu corazón).
      1. Cuando hablábamos del diezmo, ¿cuál fue la parte del desafío de Dios que captó más tu atención? (Las bendiciones).
      2. ¿Eso ha cambiado? (Ese sigue siendo un elemento central: si siembras escasamente, cosecharás escasamente. Si siembras abundantemente, cosecharás abundantemente. Si le das a Dios, ¡Él promete bendecirte!)
   10. Lee 2 Corintios 9:10-11. Da un paso atrás y considera cómo actuarías según las promesas de 2 Corintios 9:6-7 a la luz de las declaraciones de Malaquías 3. ¿Cuánto darías? (2 Corintios 9:7 dice que tú decides, pero ten en cuenta que el 10 % es el punto de referencia histórico de Dios. Más importante aún, el tema constante es que dar a Dios no te cuesta nada. Lo que das se devuelve a tu vida como bendiciones 2 Corintios 9:11 promete que “seréis enriquecidos en todo”, lo que os permitirá ser más generosos).
   11. Lee 2 Corintios 9:12. ¿Cuál es el enfoque de nuestro dar? (Las necesidades de los santos y mostrar gratitud hacia Dios).
   50. Lee 2 Crónicas 7:13-14. ¿Qué punto adicional debemos considerar acerca de vivir una vida bendecida? (La cuestión no es solo dar dinero para la obra de Dios, debemos ser obedientes a Su voluntad).
       1. Repasemos la introducción a esta lección. La salvación es un regalo gratuito. ¿Qué no es gratis, qué depende de nuestras acciones? (Hemos visto que Dios ofrece un “contrato” con nosotros de que si buscamos primero Su reino, si somos generosos financieramente para apoyar Su obra, si obedecemos Sus mandamientos, Él nos dará una vida bendecida y abundante).
       2. ¿Es esta una promesa hecha a cada creyente? (Hebreos 11 y la historia de Job nos muestran que esta es una regla general de vida, pero el tiempo de Dios puede variar y variará hasta que todo mal sea destruido).
   1000. Amigo, soy prueba de que ser generoso con Dios resulta en bendiciones en la tierra. Toda mi vida he trabajado para una organización sin fines de lucro para promover un principio del Reino de Dios. Cuando mi esposa y yo recién nos casamos, y éramos muy pobres, pagábamos un diezmo doble. Siempre he considerado que el 10% es el punto de referencia mínimo para dar a Dios. Mi esposa y yo ahora somos ancianos y vivimos con un “ingreso fijo”, pero mi esposa tiene un celo especial por dar dinero para ayudar al avance del Reino de Dios y de “los santos”. El Espíritu Santo guía su corazón para dar, y estamos constantemente asombrados por las continuas bendiciones de Dios. ¿Por qué no decidirse ahora mismo a ser generoso con Dios?

4. La próxima semana: El Contrato del Diezmo.

Copr. 2023, Bruce N. Cameron, J.D.

Traducido por Rafael